¿Cómo me siento?

A través del desarrollo de la inteligencia emocional somos capaces de reconocer nuestras propias emociones y las de los demás, diferenciar sentimientos, guiar el pensamiento y la conducta y ejercer el control sobre las emociones necesario para adaptarnos al medio y alcanzar metas.

Este proceso comienza con el aprendizajes de elementos sencillos como la identificación de los signos corporales relacionados con cada emoción básica y gana en complejidad con el paso de los años.

A través de este material, el niño podrá distinguir los rasgos faciales más característicos de las emociones básicas.